Coaching

OBJETIVO: PASAR DE RABIAR COMO SHAKIRA A BRILLAR COMO MILEY

28 de enero de 2023

La inmensa mayoría de nosotras nos hemos sentido alguna vez como Shakira. Por suerte, también como Miley.

Y sabemos cómo se siente al pasar de un estado a otro. Y si tú aún no lo sabes, te lo digo yo: es una PUTA MARAVILLA.

La semana pasada, Sol Aguirre, a quien admiro profundamente y a quien deberías comenzar a seguir en cuanto termines de leer este email, publicó un fabuloso texto en el que hablaba de ese primer día en el que te despiertas y ya no te duele estar sin él. Ese día en el que, de hecho, te sientes mucho más plena y más feliz que cuando estabais juntos.

Ese debería ser el objetivo.

Es normal pasar una etapa en modo Shakira. Hay que dejar fluir la mala hostia que brota a borbotones por todos los poros de tu piel cuando te enteras de que el que hasta ahora era tu compañero de vida se acaba de cargar vuestro proyecto de familia feliz engañándote con otra. Bien sea con una rubia de 22 o con una morena de 55. Ese dato importa más bien poco, aunque me atrevería a aventurar que jode más la primera opción.

A lo que iba: que sentir esa rabia acumulada, ese rencor y esa necesidad imperiosa de buscar culpables es absolutamente normal y hay que pasarlo sí o sí. La clave aquí está en no quedarte anclada en esa fase. Transitarla sí, pero no quedarte a vivir ahí.

Grita, canta a pleno pulmón «que una loba como yo no está pa tipos como túúúúúú», pégale de hostias al sofá, contrátame como coach o haz lo que tengas que hacer para canalizar todos esos sentimientos y abrirles las puertas para que vayan abandonando tu cuerpo serrano lo antes posible.

Porque cuanto antes recuperes el control de esas emociones y antes pases a la fase de aceptación, antes volverás a dibujar esa sonrisa que te hace brillar como la Diosa que eres, antes te podrás comprar flores a ti misma y antes podrás salir a bailar tú solita o, mejor aún, con todas esas amigas a las que veías menos de lo que te gustaría porque estabas compartiendo mucho tiempo de tu vida con una persona que ya no estaba ahí para ti.

Y como llevo dos semanas enteras con la canción de Miley en bucle llenándome de power, me he venido arribísima y he pensado que, si te animas a atravesar este camino de mi mano antes del 14 de febrero, te voy a hacer dos regalos:

Regalo uno: Te voy a mandar un pack de diez matasuegras.

¿Para qué? Pues mira, para lo que quieras. A mí me gustaría que fuera para celebrar esa nueva y fabulosa vida que tienes por delante, pero si aún no te sientes capaz, he optado por mata-suegras y no por cañones de confeti por una razón bastante obvia. 😉 No es una bruja como la que tiene Shakira en su balcón, pero nos puede servir.

Regalo dos: Te voy a mandar este ramo de tulipanes QUE FLIPAS DE BONITO.

¿Para qué? Pues para que veas que no le necesitas a él para que tu vida sea bella. Lo ideal sería que esas flores te las compraras tú, como Miley, pero por si aún estás más en el punto de desgastar los matasuegras y de darle hostias al sofá, de este primer ramo me encargo yo.

P.D: Si quieres leer el post de Sol Aguirre del que te hablaba al principio, puedes hacerlo aquí

You Might Also Like

No hay comentarios

Dejar un comentario